SEÑOR, QUÉDATE CON NOSOTROS

El encuentro con Jesús es un proceso largo,
como el de los discípulos de Emaús.
El desaliento, el sinsentido nos atenaza.
Sentimos el vacío, se esconde la esperanza.
Jesús nos acompaña y camina a nuestro lado.

Aunque camine por cañadas oscuras
nada temo porque Tú vas conmigo.
Tú siempre estás a mi lado, en mis noches.
 
Acoge la pregunta de Jesús:
¿De qué hablas por el camino?
¿Qué es lo que llevas en el corazón?
¿Cómo es tu vida?

Jesús quiere que vivas en plenitud.
Abre el oído, acoge su Palabra.
Jesús la explica para ti.
Su Palabra de vida hace arder mi corazón.

Jesús, ¡Quédate conmigo!
Quiero caminar a tu lado.
Sentarme a la mesa contigo. 
Tú partes el pan y me lo das.
¡Eres el Señor!
¡Eres mi camino, mi verdad y mi vida!
Quédate siempre, conmigo.  
Vuelvo a la comunidad a contar lo que he vivido.
Anunciar con alegría tu presencia viva entre nosotros.